
Ya sé yo mis cosas es una actitud que arrastro desde la infancia y que me encanta. Es mi manera de marcar unos mínimos de distancia entre las preguntas y las respuestas sobre aquello que no me interesa o no quiero abordar. En esa confortable posición arrancó mi blog a finales de 2010.
Escribir es pasar la vida por un filtro de trama prieta, y deleitarse con las frases que tamizarán los cuadernos, los diarios o las sábanas donde quedarán impresos los sueños. Escribir es crear y vivirte lo que tú quieras.
Ya sé yo mis cosas es un lugar de refugio y respiro donde escribo sobre lo que quiero, como quiero y con la frecuencia que me permiten los días. No abordo misterios, no doy respuestas, no pontifico, no marco opinión pública ni cuento con tener troles que me dañen. Mi blog es un espacio amable donde doy rienda suelta a mis cosillas con la mera intención de gozar del acto de escribir y desparramarme; un ejercicio sanador para mi alma, siempre necesitada de poner orden en las ideas y en las emociones que me guían los pasos.