Decidí un día que nunca más volvería a una manifestación. No viene a cuento ni por qué ni cuándo dije nunca más. Es verdad que algunos años me he encontrado con la manifestación del 8 de marzo y he tenido tentaciones de ponerme en la fila y avanzar por la causa junto a mis hermanas. Pero es que, como he dicho, decidí un día que nunca más volvería a una manifestación. No siempre lo consigo, pero intento respetarme en las decisiones que tomo.
El 8 de marzo me convoca cada año y coquetea con mi resistencia. Con sus elementos morados en las cartelerías, en los logotipos, en las campañas, en los periódicos, en las moscas de la tele, en los actos, reportajes e informaciones de los días previos. Y yo, que soy feminista tardía, pero convencida y militante cada uno de mis días, busco la manera de visibilizarme junto a todas las mujeres y hombres que en este día recuerdan a toda la sociedad que no se puede no ser feminista, y que el futuro será feminista o no será. Que en el feminismo cabemos todas las personas que creemos en la igualdad de derechos y oportunidades para todas las personas, usen el pronombre que usen. Y que no entiendo cómo no podemos estar de acuerdo en esto.
Habrá formas de abanderar, expresar o interiorizar el sentimiento feminista y habrá talantes más acogedores junto a otros más exigentes e, incluso, intransigentes. Pero a mí me gusta pensar, que cada 8 de marzo podemos dejar a un lado lo que nos distancia y echar el resto en lo que nos une: un anhelo de sociedad en el que las mujeres somos al fin libres y nos sentimos seguras, capaces, orgullosas del camino andado y respetadas en las decisiones que decidimos tomar. Es lo que toca hoy.
Es 8 de marzo y llevo mi pulsera morada. Tenía previsto ponerme hoy esta camiseta con poderío feminista, porque parece que es hoy cuando toca recordar, entre otras cosas, que «Juntas somos imparables – Elkarrekin geldiezinak gara». Y así es, toca hoy. Pero no creo que pierda sentido si me la pongo mañana o pasado… Las mujeres somos capaces de hacer grandes cosas juntas.
Feliz Día Internacional de la Mujer